@LauraPonts Cada foto parece algo sencillo solventado a base de saber sacar del armario el detalle justo para una composición irresistible. Con su particular perspectiva, uBusca transmitir y compartir emociones. Amante de lo exquisito, se reconoce curiosa e inquieta. Cada imagen aúna sabores, sustancias, suspiros y secretos. Pero también sorpresas, alquimia, color, pasión y memorias. Son su refugio, una puerta abierta a la creación.
Cada imagen tiene un sentido, armónicas, bonitas, casi místicas, ellas hablan por sí solasna modesto producto crudo puede ser una fiesta a simple vista. Confiesa que la comida es su vida, pues le gustan sus colores, el olor, la fusión, las mezclas y, sobre todo, comer. Como decía la escritora Virginia Wolf: «No puedes pensar bien, amar bien, ni dormir bien, si no has comido bien».
Para sus fotos utiliza un iPhone, pero dice que lo más importante es tener luz natural. No sabe cómo funciona una cámara, por la que reconoce un profundo respeto y falta de tiempo para ella. «Intento ser original y que sorprenda. Dispongo de pocas cosas. No compro nada. Cartulinas, pañuelos, sábanas, maderas, muebles, espejos… Intento darle juego. ¡Todo lo que aparece en Instagram lo hago en el suelo de mi terraza! Y siempre a mediodía, cuando tengo un par de horas libres para cocinar, fotografiar, comer y limpiar. ¡Es puro placer, os lo aseguro!».
Busca transmitir y compartir emociones. Amante de lo exquisito, se reconoce curiosa e inquieta. Cada imagen aúna sabores, sustancias, suspiros y secretos. Pero también sorpresas, alquimia, color, pasión y memorias. Son su refugio, una puerta abierta a la creación. Cada imagen tiene un sentido, armónicas, bonitas, casi místicas, ellas hablan por sí solas.
Laura López – @LauraPonts
