Por Oscar Soneira. @oscarsoneira
Reina entre los varietales blancos, allí aparece la Riesling. Bien conocida su reputación en su Alemania natal, también se ha plantado en muchas otras regiones, aunque no se consigue un éxito igual.
Sólo Austria puede presumir de casi el mismo resultado que en el país germano.
Varietal de acidez pronunciada, perfumada y floral, con notas de melocotón, fruta blanca y cítricos.
Y es de allí, de Austria, de donde procede Schloss Gobelsburg, bodega fundada en 1137 y dirigida por monjes hasta 1996. Gozan de 40 hectáreas de viñedo, en las que se planta un 50% de Grüner Veltliner, 25 % de varietales tintos y un 25% de Riesling.
El Riesling Heiligentein 2006 es uno de tantos vinos hechos con Riesling en esta bodega, Un vino increíble, repleto de matices y con una estructura envidiable.
Matices que se aprecian desde el principio con su bonito amarillo limón, limpio y brillante, con preciosos tonos dorados. Perfumado a cítricos que recuerdan a la cáscara de limón y la carne del pomelo. Agradables recuerdos de hinojo, que te llevan a un corazón carnoso, melocotón de viña maduro, dulce almíbar, gotas de miel y frescura, mucha frescura.
En boca tiene una entrada franca, de marcado carácter cítrico. Mordisco al pomelo, zumo de naranja sanguina. Albaricoques maduros, nísperos y melocotón. La acidez como manda, brutal. Alta. Limpia. Notable. Se alarga en boca, acercando recuerdos vegetales, anisados. Finaliza con una amargor, que incita a más.
Vino largo y complejo que roza la perfección. Trago larguísimo, elegante que sirve de broche y complemento a muchos momentos. El Riesling Heiligentein 2006 es como un traje de alta costura.
Schloss Gobelsburg, Schlosstrasse 16 A-3550 Gobelsburg, Austria – +432734 2422 + @ Scholz @gobelsburg.at
